Barcelona, 24 sep (EFE).- El Departamento de Agricultura de la Generalitat triplicará las fumigaciones aéreas contra la plaga de procesionaria que ha aumentado y afecta a numerosos bosques de pinos de Cataluña.
Según ha informado la Generalitat, para llevar a cabo estas fumigaciones, que comenzarán la próxima semana sobre 20.000 hectáreas de bosques en 43 municipios de las 12 comarcas más afectadas, utilizarán un producto biológico.
La procesionaria del pino (Thaumetopoea pityocampa) es un lepidóptero defoliador que, además de ocasionar daños de consideración en extensiones importantes de bosques de pinos, origina urticaria y trastornos alérgicos a las personas y a los animales.
Las condiciones meteorológicas de los últimos años en Cataluña, con inviernos y otoños muy templados, han hecho que la mortandad de las orugas haya sido muy inferior a las habituales con el resultado de un importante incremento de esta plaga.
Según la Generalitat, el producto que se utilizará es biológico (Bacillus thuringiensis kurstaki), compatible con la agricultura ecológica y no está clasificado como tóxico, irritante ni como peligroso para el medio ambiente ni para los organismos acuáticos.
Además, las fumigaciones se limitarán de acuerdo a la legislación vigente, que prohíbe los tratamientos aéreos a menos de 100 metros de zonas habitadas.
La selección de las zonas a tratar se han priorizado considerando diferentes parámetros como el grado de afectación del año anterior, la reiteración de las afectaciones o el impacto paisajístico, entre otros.
La Generalitat ha informado a las asociaciones de personas afectadas por sensibilidad química múltiples, así como a apicultores y titulares de explotaciones ganaderas ecológicas y a los ayuntamientos que recibirán tratamiento.
El invierno pasado los daños que produjo la procesionaria fueron muy considerables en diferentes lugares de Cataluña.
Según las prospecciones efectuadas por los agentes rurales, de las 725.000 hectáreas de diferentes especies de pinos que hay en Cataluña, unas 150.000 estaban afectadas en diferentes grados y más de 20.000 en el grado más elevado.
Por esta razón, según Agricultura, existe una alta probabilidad de que el próximo invierno los daños "vuelvan a ser extraordinarios", con los consiguientes perjuicios sociales, económicos y ambientales.
Esto, sumado a las peticiones de numerosos ayuntamientos, ha hecho que la Generalitat haya decidido triplicar la campaña de control de esta plaga.
La campaña de fumigación comenzará la próxima semana y está previsto que termine a finales de octubre.
La procesionaria es una plaga autóctona que afecta principalmente a los pinos y sus principales perjuicios afectan a las personas (reacciones alérgicas, urticarias ...) y los animales (ganado y, sobre todo, perros), ya que los árboles generalmente se recuperan, aunque pierden mucha vitalidad y pueden llegar a quedar totalmente defoliados.
Según los biólogos, la procesionaria es un insecto autóctono que no se puede erradicar y que en determinadas circunstancias las poblaciones aumentan y se convierten en una plaga. EFE