La mosca blanca es una de las plagas más peligrosas en los cultivos intensivos de invernadero. Las especies solanáceas (como el tomate o el pimiento y la berenjena) y cucurbitáceas (como el pepino, calabacín, el melón o la sandía) resultan especialmente dañadas por la transmisión de virosis que afectarán a la normal producción del cultivo.
Las ninfas de mosca blanca se fijan a la hoja y evolucionan hasta alcanzar la fase de adulto, en un desarrollo que se ve beneficiado por las temperaturas en torno a 30°C, un ambiente habitual en los invernaderos.
La mosca blanca succiona la savia y debilita la planta, pero además su excreción de melazas favorece el establecimiento de hongos que suponen un destrío comercial. Del mismo modo, esta plaga transmite virosis, lo que compromete el propio crecimiento del cultivo. Por este motivo, es fundamental combatir activamente su aparición y controlar las poblaciones para reducirlas al mínimo posible.
Kenogard ha desarrollado una estrategia fitosanitaria para controlar la mosca blanca, utilizando productos bioracionales, respetando a los artrópodos auxiliares y con el mínimo residuo posible. Esto ayuda a producir cultivos sanos y fomenta una sostenibilidad del mismo libre de la plaga. Los insecticidas que propone Kenogard para lograrlo son Juvinal® 10 EC y NoFly®.
Juvinal® 10 EC (Pyriproxyfen 10% EC): es un insecticida específico para controlar la mosca blanca en los principales cultivos hortícolas. Actúa regulando el crecimiento de huevos y larvas, al mismo tiempo que respeta a los artrópodos auxiliares.
El uso de Juvinal® 10 EC está autorizado sobre tomate, berenjena, pimiento, cucurbitáceas de piel comestible y semilleros hortícolas. Se aplica por pulverización manual o mediante cañón atomizador desde el exterior e instalaciones fijas automatizadas en los invernaderos, en dosis de 50-75ml/hl con un plazo de seguridad de 3 días.
NoFly® (Isaria -Paecilomyces- fumosorosea cepa FE9901 18%): es un insecticida bioracional compuesto por esporas del hongo entomopatógeno. Actúa sobre todos los estadios de la mosca blanca, pero con mayor intensidad sobre huevos y larvas. Destruye sus tejidos al penetrar como esporas en el insecto y desarrollarse sus hifas y micelio en su interior.
Para su mejor eficacia se recomienda aplicar a última hora de la tarde y preferiblemente tras el riego, buscando unas condiciones de temperatura y humedad más adecuadas para el funcionamiento del hongo entomopatógeno. Debe cubrir la superficie foliar del cultivo y puede aplicarse hasta 4 veces por campaña, con intervalos de entre 5 y 7 días pero sin necesidad de plazo de seguridad. NoFly® está autorizado para utilizarse sobre tomate, pimiento, melón y calabacín, en cultivos de invernadero, a 200-250g/hl y es del todo respetuoso con los artrópodos auxiliares.
La aplicación de Juvinal® 10 EC y NoFly® en los momentos indicados, teniendo en cuenta el estadio de la plaga, las sueltas de auxiliares y las condiciones ambientales, se convierte en una estrategia imbatible y sostenible contra la mosca blanca.
